ECUADOR: “RAFAEL CORREA RENUNCIÓ SU CARGO A LA PRESIDENCIA”

“RAFAEL CORREA RENUNCIÓ SU CARGO A LA PRESIDENCIA”

La UNESCO, en 1999 declaró al centro histórico de mi hermosa ciudad de Cuenca como PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD. El honor de este merecimiento tiene como fin proteger y conservar su riqueza arquitectónica, artes, tradición cultural, tradiciones vivas, artesanías, etc., que han hecho de la tercera ciudad del Ecuador, una ciudad turística hermosa para propios y extraños. De entre las mejores tradiciones vivas y culturales que todavía se practica, aunque con algunos cambios, recuerdo una de carácter religioso, trasladada desde España y que la conocíamos con el nombre del “Día de los Inocentes”, que daba inicio el 28 de diciembre y terminaba el 6 de enero. Eran diez días que el pueblo disfrutaba, unos del culto católico muy conservador en ese entonces, y otros de la fiesta misma. En las noches se “quemaban castillos, cohetes, palomitas, globos” (juegos pirotécnicos). En la calle principal Simón Bolívar y con frente al Parque Calderón, entre dos hermosas catedrales, gentes de todas las edades y de toda condición social, ricos y pobres, se daban cita para disfrutar de las comparsas de Los Inocentes. Los actores eran niños, jóvenes, mujeres y adultos que, ocultando sus rostros y cuerpos, se disfrazan de personajes propios de mi ciudad como el “atacocos”, el famoso “Carlitos de la bicicleta”, “el suco de la guerra”. Otros se disfrazaban representando a políticos de la ciudad y del país, para burlarse de ellos por los engaños y abusos al pueblo. Era una linda fiesta popular. Cada comparsa tenía uno o varios payasos quienes lucían sus bellos y costosos trajes multicolores, zapatos bicolores muy grandes, medias de lana y de colores hasta sus rodillas, pinturas o máscaras en sus rostros, una nariz muy grande, y una gorra o un pañuelo que cubría su cabeza. Llevaban en sus manos una enorme “morcilla” de hasta setenta centímetros de largo, que los permitía a éstos payasos dirigir en orden la marcha de las comparsas. Estos payasos entretenían a sus conciudadanos y nos enseñaban a cantar, (no como el Patiño): “Payasito payasón, danos pronto la lección, en la esquina de la estación…”

Esta fiesta lamentablemente ha ido perdiendo su encanto gracias al Payasito. Entre los ciudadanos, durante los diez días se ingeniaban para realizar bromas con mentirillas, con invenciones y cuentos para reírse de sus amigos y familiares. Cada 6 de enero era aprovechado por los medios de comunicación para dar noticias falsas, con titulares de hechos y circunstancias inexistentes. Como ejemplo, dirían: “RAFAEL CORREA RENUNCIÓ SU CARGO A LA PRESIDENCIA”: “El Presidente pidió perdón a los ecuatorianos por su incapacidad manifiesta de gobernar al país luego de diez años de fracaso de su modelo económico”.

Los ciudadanos que leían la “prensa corrupta” dirían: “que bien que ha renunciado Correa, ya era hora, ya no soportamos al corrupto”; los gobiernistas: “que pena, no lo puedo creer, quedamos sin teta, pero me quedan unos milloncitos de ahorros en el exterior”. Otros más avispados dirían: “tonto, caíste por inocente”.

Claro, ahora somos “los inocentes”, los engañados, los ofendidos, los insultados, los despedidos de sus puestos de trabajo, los estudiantes, los trabajadores, las amas de casa, los indígenas, el pueblo ecuatoriano empobrecido, que van entrando en razón y se van dando cuenta del engaño morboso de diez años vergonzosos que quedará en los Anales de la Historia ecuatoriana del paso sin pena ni gloria del Presidente Rafael Correa como el mandatario mentiroso, corrupto, y el peor de los presidentes.

Correa quiere la reelección y espera pacientemente que ocurra un milagro. Pero ahora ya no hay inocentes que le crean al payasito payasón que ha dado morcillazos a diestra y siniestra a los pobres inocentes ecuatorianos, enviándolos a la cárcel con juicios vergonzosos, con juicios políticos amañados, enseñándonos una lección que no olvidaremos jamás. Payasito payasón nos ha dado una cátedra de corrupción total.

La larga nariz del payasito ha crecido tanto que ahora es el Pinocho de la revolución ciudadana, cuando dice: “Si mañana fueran las elecciones…Hay tres candidatos: yo, que no me voy a lanzar; Lenin Moreno; Jorge Glas”. Vean que de primero va el burro, “YO”. Después Lenin Moreno otro payasito payasón que debe devolver el dinero recibido ilegalmente para vivir como millonario en Europa; y luego Glas, que deberá rendir cuentas al país, al igual que su Jefe y sus panas de la nube rosada.

Payasito payasón está cercado. Payasito payasón se siente cercado. Payasito payasón está siendo aporreado por el pueblo que quiere un cambio verdadero. Payasito payasón ya no tiene credibilidad. Payasito payasón deberá rendir cuentas al final de su mandato. Payasito payasón va a la cárcel por no darnos una lección de moral, de ética. Payasito payasón…