martes, 17 de noviembre de 2015

LA VERDAD DEL PRESIDENTE CORREA

“Las verdades” del Presidente Rafael Correa solo le sirven a él. Cuando dice su verdad, con seguridad hace todo lo contrario y le miente al pueblo ecuatoriano. No existe conformidad en lo que dice, lo que siente o piensa. Tiene un doble discurso, hace todo lo contrario a lo que dice y actúa con prepotencia, siempre de manera contraria a su verdad, para conseguir un fin esencial que solo está en su dañado cerebro: la maldad, el resentimiento y odio a los que no piensan como él, sus enemigos. Es una víctima social de su niñez en Guayaquil. Ahora después de haber destruido y dividido al país, después de haber destruido todas las Instituciones del Estado, de tener el Poder absoluto, desde hace algún tiempo lanza su ponzoñoso veneno y odio a los militares. ¿La razón? ...

Desde que fue candidato a la Presidencia en el 2007, a espaldas del pueblo se alió con partidos políticos de izquierda: el MPD, Movimiento Popular Democrático, que tenía cientos de miles de afiliados y seguidores, pero al final rompieron con Correa y el Tribunal Electoral de bolsillo de éste, les quitó su nombre y Registro de partido político (tenían más de 200.000 votos duros). Destruyó a la Unión Nacional de Educadores, UNE, con insultos en sus sabatinas, hasta que se tomó ilegal e inconstitucionalmente los ahorros de los maestros que ascendía a 600 millones de dólares, privándoles de seguir haciendo con esos fondos lo que venían haciendo algunos años, el dotar de casas a sus maestros afiliados. En más de 9 años de gobierno Correa no ha realizado un proyecto habitacional para nadie. El MPD les dio cátedra en construcción de viviendas, con dineros propios de los maestros. Correa los acusó de ser parte del MPD, los tira piedras. Acabó con la Unión Nacional de Educadores, UNE, y también acabó con los fondos de los maestros.

También se alió con el Partido Comunista, al que lo dividió y lo desapareció. Igual, el Partido Socialista, que lo dividió. Se alió con gente que fueron de la Izquierda Democrática y al final los sacó de su gobierno desde que se convirtieron en un nuevo partido político. (Talvez otros 200.000 votos duros)

Se alió en su campaña presidencial con terroristas narco-revolucionarios de las FARC de Colombia y recibió de ellos cientos miles de narco-dólares para su campaña política que a la postre le sirvió para ganar la Presidencia en segunda vuelta. También se alió con el grupo terrorista de Alfaro Vive Carajo, AVC., (no más de TREINTA VOTOS DUROS), minúsculo grupo terrorista de asesinos de policías, que asaltaron bancos, secuestros con muertes, etc.

Correa nos engañó a todos los ecuatorianos, nos mintió. Jamás dijo que quería llevarnos a un comunismo obsoleto. Jamás nos dijo que tenía un gran plan de gobierno para tomarse todas las instituciones del estado y deshonrar a personas e instituciones, hasta convertirse en un gobierno dictatorial en donde no se respeta ninguna ley, ni siquiera los mínimos derechos consagrados en la Constitución Política del Estado, en los Derechos Humanos. Existen crímenes de Estado con más de media docena de fallecidos; existen muertes políticas que no han sido esclarecidas en el transcurso de 9 años de desgobierno. Existen decenas de juicios en contra de policías que están presos por su odio y mentiras de que lo quisieron matar, que lo secuestraron; existen presos políticos sin orden judicial de detención, especialmente de jóvenes que han sido torturados, privados de su libertad solo por manifestarse; existen sentencias en contra de opositores, presentando testigos falsos y jueces obedientes; hacen mal uso de la prisión preventiva para acallar a la oposición; utilizan a la justicia y a sus jueces corruptos para persecuciones políticas, etc., etc.


Por ello, creo es hora de pedir cuentas a Correa, pedirle LA VERDAD de su alianza con el grupo terrorista AVC, que antes asesinaron y robaron, para hoy ocupar altos cargos públicos. Nos preguntamos que habrá detrás del odio de Correa hacia los militares que cumplían simplemente su deber, las órdenes del Comandante de las Fuerzas Armadas de ese entonces el ex Presidente León Febres Cordero. El servicio que prestó las FF. AA. a la patria ecuatoriana cuando acabaron con el terrorismo del grupo AVC es incuestionable, es el sentir de millares de ecuatorianos que vivimos esas duras épocas. El servicio al Estado Ecuatoriano por las FF. AA. no puede ser mancillado por los ahora “VICTIMAS”, terroristas de la misma ralea que los terroristas de EI (ISIS) que han atacado y siguen atacando a civiles, como el último ataque en la ciudad de París. Locos, dementes, igual unos y otros. Correa debe contarnos y decirnos la verdad: ¿por qué y para qué se alió con el grupo terrorista de AVC de apenas unos pocos miembros? ¿Será que cuentan con el apoyo del Presidente para reclutar y entrenar jóvenes en la violencia del Estado contra ciudadanos ecuatorianos de “la oposición”? ¿Será que quieren reclutarlos de entre más de 400.000 bachilleres que no han podido acceder a las universidades del país? ¿Será que miles de estudiantes serán reclutados y entrenados por los que recibieron instrucción de terroristas en Libia, los AVC ahora infiltrados en el gobierno? ¿Será Correa su Comandante en Jefe para mantenerse en el poder por cincuenta años y evitarse un juicio por lesa humanidad cometidos por su gobierno?

Si León Febres Cordero como ex Presidente cometió excesos en contra de los derechos humanos, Rafael Correa ha ido más allá. Tenemos terroristas y se viene la fuerza armada de AVC. Si querían acusar a Febres Cordero de delitos de lesa humanidad, les falló el plan porque se les murió “el cuerpo del delito”.  Por ello, la famosa Comisión de la Verdad nombrada a dedo por Correa, jamás hizo una investigación seria de los excesos de Febres Cordero y ya tenían el plan para declarar que los militares cometieron el delito de lesa humanidad y hay que acabar con ellos como un asunto político; tenían lista una ley denominada: “Ley para la Reparación de las Víctimas y la Judicialización de Graves Violaciones de Derechos Humanos y Delitos de Lesa Humanidad ocurridos entre el 4 de octubre de 1983 y el 31 de diciembre de 2008”.  A Correa no le importa ni le importará que los ecuatorianos nos sentimos protegidos por los militares, cuando AVC nos declaró la guerra a los civiles. El Ecuador se salvó, se defendió, se protegió, previniendo a lo mejor un mal menor que fue violar los derechos humanos de terroristas asesinos, de asaltantes, hasta acabar con ellos. AVC como terroristas sabían el peligro que corrían y enfrentaron la muerte; ellos sabían las consecuencias y siguieron adelante en una lucha de terror en contra de todo un pueblo, tal y como ha ocurrido en Colombia y Perú, con ciento de miles de muertos en ataques terroristas. Existen ahora órdenes de prisión preventiva de oficiales que cumplieron órdenes superiores (igual que los oficiales que cumplieron órdenes de Correa el 30 septiembre del 2010 y que fueron a “rescatarlo” sin importarles los muertos y heridos que dejaron en “su liberación o rescate”). Ahora Correa, la Fiscalía, Ministros y más funcionarios públicos no hablan de secuestro, sino de “un golpe de estado blando”.  


Los ecuatorianos jamás conoceremos la verdad de su Alianza con AVC. Será un imposible, pero si podemos dar cuenta de una serie de eventos, que nos llega como conclusión, PERSECUCION a los militares. ¿La razón? Murió Febres Cordero (15 diciembre del 2008) y por eso se le acabó el circo, pero el pacto con AVC continúa y existe persecución a los militares. Talvez Correa esté pensando que el AVC que resucita en su gobierno sea el BRAZO ARMADO DE LAS NUEVAS tropas del Ecuador, ¿para matar a los opositores? ¿Para acallar a todos los que se manifiestan en contra de Correa? ¿Para sembrar el caos y terror y seguir llevándose el dinero de las arcas del estado y colocarlos en el exterior, al más puro estilo de Castro, Chávez, Maduro, Ortega, etc., en perjuicio del pueblo?


No pretendo defender el gobierno de Febres Cordero. Estoy en contra de la violencia, venga de donde venga. Tampoco justifico los delitos contra los derechos humanos. Solo pretendo dejar constancia que desde la Alianza de Correa con los AVC no nos dan una verdad, una explicación. Los terroristas no llegan a treinta personas, y los ecuatorianos somos 15 millones de ciudadanos honestos. Correa ataca por delitos de lesa humanidad a militares honestos o no, los persigue, los acosa. Correa presenta a nombre del Estado Ecuatoriano su solidaridad con Francia que ha declarado la guerra a los terroristas de EI (ISIS). Pero acá al AVC se los premia. Se ordena que el Ministerio de Cultura abra un Museo en honor a los terroristas de AVC, se los otorga la calidad de héroes, y se les indemniza con más de 50 millones de dólares. Ya veremos los nombres de los guerrilleros “fallecidos en acción”, en plazas, parques, teatros, centros culturales, etc. En otro escrito, demostraré el plan de acoso del gobierno de la revolución ciudadana a los militares. Es hora de terminar la farsa. Basta ya. Salvemos la democracia. No a la reelección que significará un continuismo del correismo.  NO más de lo mismo.

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